V.-NO COMER PRIONES

Éste mandato sirve para evitar el envejecimiento producido por priones.

LOS PRIONES PLEGADOS DE LA CARNE ENVEJECEN

Los priones son unas proteínas inteligentes que están ancladas en la superficie de las células. Cada célula tiene dos priones, uno del padre y otro de la madre. Analizan el medio extracelular y se comunican con el ADN del núcleo. Pueden emitir ordenes y controlarlo todo. El Prión es literalmente el cerebro de la célula. Sin prión la célula no sirve para nada. Cuando la célula quiere suicidarse al final de su vida programada el prión se inactiva y se desancla y cae, solo entonces entra agua al interior celular y la célula estalla. Los priones inactivados en la apoptosis (MUERTE NATURAL CELULAR POR SUICIDIO AL FINAL DE SU VIDA PROGRAMADA) se disuelven sin dejar rastro.
La muerte celular por ASESITANO CELULAR es una muerte artificial que trae consecuencias. Cuando una célula muere asesinada, sin agotar su vida útil, no desactiva al prión que sigue anclado en superficie. El prión anclado no se desprende de la célula muerta y en vez de disolverse y desaparecer se pliega y se vuelve pegajoso. Un prión plegado es indestructible por el organismo. Dura toda la vida dentro de él. A medida que se acumulan los priones aparecen conglomerados priónicos pegados a los tejidos. Son las manchas amarillentas parduscas que vemos en la piel de las manos de las personas ancianas.

Los priones pegajosos circulan por la sangre y se pegan a otros priones de células vivas. Uno encima de otro terminan por tumbar al prión vivo que cae sobre otros priones vivos. Se produce un derrumbamiento en cadena, como fichas de domino, y un envejecimiento acelerado por muerte celular en cadena.